lunes, 2 de marzo de 2015

Cuando una puerta se cierra, una ventana se abre...

En este blog quisiera mostraros también mi faceta de "fotógrafa". Me gusta mucho la fotografía. Por eso, cuando viajo  o cuando voy a sitios con paisajes preciosos me gusta guardar esos recuerdos. 

No sé que es para vosotros una fotografía, pero para mí es mucho más que una imagen. Son recuerdos, sentimientos. Estoy segura que os ha pasado alguna vez: cuando miras fotografías del pasado os transmiten sentimientos. Alegría, dolor, amor, satisfacción, amargura, felicidad, pasión, ternura... 



Esta imagen la saqué en la Al-Hambra, en Granada. Para los que no hayáis ido os lo recomiendo sin ninguna duda, ya que es un lugar para emocionarse y dejarse llevar por los sentimientos. A mi me cautivó. En esta imagen quise captar el contraste entre la oscuridad y la claridad. Muchas veces nos ofuscamos con seguir el mismo camino, una y otra vez, y nos chocamos, y nos tropezamos... y así sucesivamente. Hasta que un día, ves la luz y una ventana se abre. Cuando una ventana se abre hay que aprovechar la oportunidad, no dejarla escapar, como pasa con las fotografías. 



La segunda imagen son dos ventanas, también de la Al-Hambra. En esta imagen no hay tanto contraste entre la oscuridad y la luminosidad pero para mí sí hay contraste entre el interior y el exterior. Personalmente, esta imagen me hace pensar sobre las posibilidades que hay en el exterior y muchas veces no las aprovechamos. Además, en esta imagen hay multitud de elementos del arte árabe como el tipo de arco, la perfección en los detalles que rodean la ventana... 

Como veis, una fotografía no es sólo una imagen, al menos para mí, es mucho más que eso.

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